Cómo posar en una sesión de fotos profesional (mujer)
Poses que puedes poner en práctica en tu próxima sesión de fotos profesional en estudio.
En nuestro estudio trabajamos de la misma forma que para una editorial de revista.
Todo el mundo se merece tener fotografías profesionales que puedan protagonizar la portada de una revista. El maquillaje y peluquería está incluido en la sesión y también tenemos asesoramiento de estilismo. Una sesión completa con varios cambios de look, varios fondos fotográficos y esquemas de iluminación. Cada sesión está pensada especialmente para cada persona.
En una sesión en el estudio todos se sienten como modelos por un día. La idea de trabajar de esta manera es mejorar tu imagen, tanto tu perfil personal como profesional. Se trata de un estudio fotográfico profesional en Madrid en el que ofrecemos un servicio exclusivo y personalizado.
El elemento esencial de todas las siguientes poses es la mirada, la actitud a cámara. Las poses que narramos a continuación ayudan a reformar y enfatizar esa expresión. Analicemos las poses que más se suelen repetir en una sesión de fotos profesional:
Poses de pie:
Retrato de portada de revista:
Plano hasta la cadera. Típica portada de revista. Es una imagen muy directa y potente. La idea es crear triángulos entre el brazo y tu cintura para estilizar la silueta. Esta pose puede ser frontal o a 45 grados de la cámara. Las prendas que marcan la cintura son las más favorecedoras para esta pose.
Retrato con los brazos cruzados:
En esta pose el plano se cierra hasta la cintura. Es una imagen imponente donde la mirada juega un imprescindible papel, puesto que intentaremos que las manos pasen a un segundo plano.
Retrato primer plano (close up):
Primer plano, donde la línea de los hombres y los brazos es clave para crear las formas armoniosas que enfaticen tu mirada.
Sobre la pared:
Retratos de medio cuerpo apoyado sobre la pared que trasmiten naturalidad y frescura.
Poses sentada:
Tres cuartos:
Aprenderás a posar como una profesional. Puedes probar estas poses a 45 grados de la cámara (tres cuartos) poniendo mucha atención a los triángulos y espacios vacíos que creas con tu cuerpo y que estilizan la figura. Te recomendamos que te ayudes de un espejo, será muy divertido.
Rodillas cruzadas:
No te olvides del juego que pueden dar las piernas. Rodillas cruzadas o juntas, una más arriba que la otra o pies apoyados en diferentes niveles generarán leves inclinaciones que te ayudarán en la pose final.
Poses sobre una mesa:
Poses sentada sobre una mesa de madera:
Hay infinitas poses que se pueden hacer sobre una mesa. Es un punto de apoyo que da seguridad y aporta un lenguaje corporal que transmite naturalidad, frescura y originalidad a cualquier look. Perfecto para una cualquier sesión de retrato.
Primer plano:
Poses relajadas donde cobra protagonismo la colocación de los brazos. Lo ideal es que las dos manos no tengan protagonismo al mismo tiempo. De nuevo, la línea de los hombres y los brazos juegan un papel importante y las poses asimétricas ayudarán.
Retrato casual y emocional:
Es el momento Freestyle de la sesión. Exagera todas las poses, añade sonrisa, y todo lo que quieras para crear retratos desenfadados y divertidos.
Si quieres realizar una sesión de fotos profesional ponte en contacto y pide más información a través de nuestro formulario de contacto.